Reseña: Ghost Girl

Descripción:

Esta es la primera entrega de la saga de fantasmas de Tonya Hurley. La saga consta de tres libros en total, el primero y el segundo publicados ya en España. El tercero ya está escrito según confirmó la autora durante su estancia en España pero aún no hay fecha para su publicación.

Título: Ghost Girl

Autor: Tonya Hurley

Editorial: Alfaguara

Nº de Páginas: 340

ISBN: 9788420473055

PVP: 19,50€

Resumen:

¿Alguna vez te has sentido invisible?

En el mundo yo era sólo una persona más, pero anhelaba ser el mundo para una persona.

Cuando la popularidad es cuestión de vida o muerte

Charlotte Usher se siente prácticamente invisible hasta que un día lo es de verdad. Peor aún: está muerta. Y todo por culpa de un osito de goma. Pero la muerte no impide que Charlotte siga con su plan. Todo lo contrario, se vuelve mucho más creativa y hará cualquier cosa por conseguir su objetivo: ser popular para seducir al chico que ama.

Opinión (puede contener Spoilers):

No me ha gustado en especial. El libro captó mi atención por al temática y por la manera tan ridícula en la que un osito de goma puede acabar con tu vida, pero lo que es la historia en sí no me atrae lo suficiente. El libro tiene sus cosas buenas como las frases tan reflexivas que aparecen al comienzo de cada capítulo que son geniales. Empiezo con mi comentario sobre la trama. Charlotte es una chica impopular a la que no conoce nadie, yo diría que no se conoce ni ella misma, y está enamorada de Damen, el chico guapo popular del instituto (a mi no me gusta). Charlotte conoce a Scarlet, la hermana gótica o distinta, de Petula, la chica guapa del instituto que está saliendo con Damen, hasta que rompen. Charlotte se hace amiga de Scarlet y le pide que la ayude cediéndole su cuerpo o dándole indicaciones para acercarse a Damen, aunque lo único que consigue con esto es que Scarlte y Damen comiencen a salir juntos. Punto final. Es que la historia puede ser buena, peor no tiene "chicha", no te atrae como para pasarte todo el día leyéndolo sin poder apartar la vista. Mi puntuación es un 6, porque aunque no me haya gustado mucho no le falta originalidad.